Condenado a 7 años de cárcel por estafar a una anciana haciéndole creer que iba abrirle una cuenta en el “Banco del Cielo”
El condenado incorporó a su patrimonio casi 300.000 euros de la mujer a la que estuvo engañando durante seis años.

Condenado a 7 años de cárcel por estafar a una anciana haciéndole creer que iba abrirle una cuenta en el “Banco del Cielo”

La Audiencia Provincial de León considera probado que el hombre ideó hacerse con todos los ahorros de la víctima aprovechándose de su deficiente estado mental
|
06/10/2023 09:22
|
Actualizado: 06/10/2023 09:31
|

La Audiencia Provincial de León ha condenado a siete años de prisión a un hombre que estafó cerca de 300.000 euros a una anciana con un trastorno mental. Le izo creer que el dinero era ingresado en el “Banco del Cielo” para poder construirse allí una vivienda junto a su madre y esposo ya fallecidos.  

La víctima padece alteración en el contenido del pensamiento, en forma de ideación delirante místico religiosa y megalomaníaca que alteraba, en su totalidad, su capacidad de juicio y decisión, pues la situaba fuera de la realidad.

Esta situación e ideas delirantes, al menos desde 2013, se hizo más presente, alterando sus capacidades cognitivas y volitivas plenamente.  

El condenado ha incorporado a su patrimonio casi 287.000 euros de la anciana, a la que estuvo engañando durante seis años.

La víctima ha perdido todos sus ahorros quedándose sólo con las mensualidades de su pequeña pensión, de las que éste no pudo apoderarse al ser descubierto y denunciado por los hijos de ella.

Ha sido condenado por un delito continuado de estafa cualificada continuada. Además de pena de cárcel, se le ha impuesto una multa de 3.420 euros, y tendrá que indemnizar a la perjudicada con 286.692,20 euros. También se le han impuesto las costas causadas, incluidas las de la acusación particular.

La sentencia, dictada el pasado 5 de septiembre (318/2023), la firman los magistrados Manuel Ángel Peñón del Palacio (presidenta), José Luis Chamorro Rodríguez (ponente) y María Belén Gamazo Carrasco.

LOS HECHOS

La Audiencia (Sección Tercera) considera probado que el condenado, conocedor del estado mental de la mujer -de sus exageradas ideas religiosas que le hacían incluso considerarse “santa”-, maquinó la posibilidad de hacerse con todos los ahorros que tenía depositados en distintas entidades bancarias.

A tal fin, hizo creer a la anciana, con llamadas telefónicas desde número oculto, que “Nuestro Señor Jesucristo” o la “Virgen María” llamaba para pedirle que sacase distintas cantidades de dinero de sus cuentas y se las diese a él para depositarlas en el “Banco del Cielo” o bien que se las llevase a la tienda que el acusado regentaba.  

Una vez allí, relatan los magistrados en la resolución “en un cuarto para masajes que había en el local, le decía que metiese el dinero en un cajón desde donde iba al ‘Banco del Cielo’, provocándole la convicción de que allí le rentaría más y podría construir una casa en el cielo, junto a su madre y esposo -ambos ya fallecidos-, haciéndole creer el acusado que también él depositaba dinero en mencionado banco celestial”.  

La Audiencia explica que para dar mayor credibilidad a las “apariciones”, el acusado escenificaba conversaciones en su tienda o al teléfono, cambiando o alterando su voz y haciendo creer a la anciana que estaba hablando con su madre fallecida, Dios o la Virgen María, presionándola al decir que iba a matar a sus hijos o hacer desaparecer el dinero depositado en el Cielo si contaba a aquéllos que estaba entregándole dinero.  

NO SÓLO PERDIÓ TODOS SUS AHORROS, SINO QUE QUEDÓ DEUDORA CON EL BANCO

La víctima, «no sólo ha perdido todos sus ahorros, sino que quedó deudora con el banco al que pidió el préstamo personal (finalmente cancelado con la acción de pago realizado por su hijo)», señalan los magistrados.

Ahora, la anciana se enfrenta a su futuro «no con lo que tenía, sino con lo que le ha quedado (únicamente su pensión devengada mes a mes) tras la acción depredadora del acusado, quien, sin duda, conocía que con sus sucesivos requerimientos, acabaría esquilmando todo el patrimonio de la anciana (recuérdese que ella, en su declaración en el juicio, llegó a pedirle para comprar pan, pues no tenía ya dinero, y él la contestó que no podía darle nada pues había tenido unos gastos imprevistos por una -supuesta- enfermedad de su madre)», exponen los magistrados. 

La sentencia todavía no es firme. Contra la misma cabe recurso de apelación ante el Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León.

Noticias Relacionadas:
Lo último en Tribunales