La acusación particular que ejerce la denunciante pedirá una sentencia que lo condene a doce años de prisión, mientras que la Fiscalía ha exigido una pena de nueve años de cárcel. Foto: EP
Dani Alves se sienta en el banquillo acusado de agresión sexual
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05/2/2024 06:30
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Actualizado: 05/2/2024 09:10
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El exjugador del FC Barcelona Dani Alves se sienta en el banquillo acusado agredir sexualmente a una joven en el baño de una discoteca de Barcelona en diciembre de 2022, caso por el que lleva un año preso y en el que se expone a hasta 12 años de cárcel.
Durante los próximos tres días, la acusación particular que ejerce la denunciante pedirá una sentencia que lo condene a doce años de prisión, mientras que la Fiscalía ha exigido una pena de nueve años de cárcel.
Tres abogados y cuatro versiones de los hechos
La defensa del jugador ha cambiado en estos años. Primero la asumió Miraida Puentes Wilson, la abogada Alves, especializada en derecho mercantil; posteriormente la asumió Cristóbal Martell, el prestigioso abogado que defendió los temas judiciales de Lionel Messi y Jordi Puyol, considerado por muchos especialistas como uno de los mejores penalista de España y ahora ha recaído en las manos de la abogada Inés Guardiola.
En este último año, Dani Alves ha cambiado hasta cuatro veces de versión sobre lo ocurrido en Sutton. En un principio dijo no conocer a la joven, después sostuvo que no mantuvieron relaciones sexuales, para finalmente reconocer que hubo sexo entre ellos pero que fue consentido. La jueza instructora, Concepción Cantón, consideró que los indicios en su contra eran de entidad suficiente como para enviarlo a prisión. Además de la declaración coherente de la víctima, los testimonios de distintos testigos, las imágenes de las cámaras del local y las pruebas de ADN recogidas en el lavabo de la discoteca ponen en entredicho la versión de Alves.
Ahora, el acusado pide a la Audiencia que lo absuelva porque mantiene que la relación sexual fue consentida y, pese a que no propone penas alternativas, sí plantea atenuantes para rebajar una eventual condena.
Su actual letrada, intentará demostrar que Dani Alves estaba ebrio la noche del 30 de diciembre de 2022, una posible atenuante a la que se añadiría la de reparación del daño, por los 150.000 euros que el futbolista ya ha entregado al juzgado para cubrir una eventual indemnización para la víctima, aunque esa cantidad se la fijó la jueza como fianza, bajo advertencia de embargo, cuando lo procesó.
Sin embargo fuentes judiciales afirman que hasta este viernes, a dos días del inicio del juicio, no existían negociaciones ni contactos entre las partes en este sentido.
Las mismas fuentes recuerdan que un acuerdo de estas características es posible hasta el mismo inicio del juicio el lunes a las 10 horas.
Medidas para proteger a la víctima
El juicio comentará con las cuestiones previas y para este mismo lunes está agendada la declaración de la denunciante, defendida por la letrada Ester García, que en la sala estará separada del acusado por un biombo para evitar que tengan contacto visual.
Igualmente, como medida de protección a la víctima, el tribunal ha ordenado que su declaración sea a puerta cerrada y la grabación judicial de su declaración, que quedará registrada como prueba, se hará pixelada y con la voz distorsionada para evitar que se la pueda reconocer si más adelante se filtra el vídeo.
El interrogatorio a Alves está fijado provisionalmente para hoy, a expensas de que su defensa puede pedir trasladarlo al final del juicio, una petición habitual para que el acusado pueda declarar contestando a todas las pruebas que se han presentado.
El juicio se reanudará con declaraciones de testigos el martes a las 15 horas, en horario de tarde por falta de disponibilidad de salas en la Audiencia.
Ya el miércoles, a la misma hora, está reservado el turno de las pruebas periciales, las conclusiones y los informes finales.
El juicio no podrá ser grabado ni emitido
El tribunal ha tomado varias medidas para preservar la intimidad de la víctima, además de las ya expuestas, relacionadas con la cobertura mediática que se podrá dar al juicio y para la que están acreditados 270 periodistas de 70 medios de comunicación, entre ellos 40 profesionales extranjeros de 23 medios internacionales.
Ante la petición de todas las partes para que el juicio completo fuera a puerta cerrada, los jueces han optado por que los periodistas puedan escuchar y contar lo que ocurra en la sala, pero no grabarlo ni emitirlo, a excepción de la declaración de la víctima, que sí será a puerta cerrada. Por eso, la única imagen de Alves en el banco de los acusados serán fotografías y vídeos sin sonido tomados durante los primeros minutos del juicio.
El tribunal también ha advertido de que está prohibido hacer fotos a la joven o sus familiares ni divulgar información sobre su intimidad o que permita identificarla: con la misma intención, todos los que intervengan en el juicio deberán referirse a ella como «la denunciante», sin mencionar su nombre.
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