Un alumno, condenado a pagar 1.000 euros a su profesora por meterse a su correo para acceder a los exámenes

Un alumno, condenado a pagar 1.000 euros a su profesora por meterse a su correo para acceder a los exámenes

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16/1/2024 09:26
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Actualizado: 16/1/2024 09:27
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El titular del Juzgado de Menores de Sevilla Nº1, Alejandro Vian Ibáñez, ha condenado a un menor a pagar 1.000 euros en concepto de daño moral a su profesora por meterse en su Google Drive sin consentimiento donde almacenaba exámenes e información personal. Es un delito contra la intimidad.

Una indemnización que, según se desprende en la sentencia dictada el 13 de noviembre, tendrá que hacer de forma conjunta con sus padres.

Además, tendrá que llevar  a cabo 55 horas de trabajos en beneficio a la comunidad. 

El juzgado considera probado que el alumno entró en el correo corporativo de su profesora desde su móvil entre febrero y abril de 2022 violando las medidas de seguridad pertinentes.

La profesora se dio cuenta por una notificación

La educadora, que trabajaba en un instituto situado en la localidad sevillana de Ginés, tuvo conocimiento del acceso fraudulento por una notificación que le llegó a su teléfono móvil. Le alertó que alguien había ingresado en su nube.

Según se explica en la propia denuncia que la mujer interpuso en la Guardia Civil, las sospechas se centraron desde un inicio en un alumno en concreto porque este tipo de alertas describen entre otros datos, el tipo y la marca de dispositivo que ingresan a la cuenta de Google Drive.

Y la marca y el modelo del terminal móvil que allí se reseñaba era el mismo dispositivo que la profesora pilló guardándose al menor para copiar durante un examen en fechas anteriores.

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Fran Peláez, abogado de PenalTech que ha llevado el caso.

Según ha explicado el abogado que ha llevado el caso, Fran Peláez, de PenalTech, este tipo de delitos tecnológicos son “extremadamente difíciles de perseguir por su complejidad a la hora de identificar al autor de los hechos”.

En este caso concreto se deduce que el intruso podía ser alguien del entorno de la educadora que estuviese interesado en el tipo de información que guarda aquella en la nube.

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