Los exresponsables del Grupo Zeta se contradijeron sobre cómo les llegó la tarjeta de Dina Bousselham
Dina Bousselham, según explicó Pablo Iglesias al magistrado Manuel García Castellón, era su secretaria en el Parlamento Europeo; las explicaciones contradictorias que dieron los máximos responsables de Interviú sobre cómo llegó la tarjeta del teléfono de la mujer a Interviú, aumenta el misterio y la confusión. Foto: PD.

Los exresponsables del Grupo Zeta se contradijeron sobre cómo les llegó la tarjeta de Dina Bousselham

|
10/7/2020 06:35
|
Actualizado: 10/7/2020 10:57
|

Contrariamente a lo que pudiera pensarse, no hay una única versión sobre cómo llegó a la revista Interviú la tarjeta del teléfono móvil que le fue sustraído el 1 de noviembre de 2015 a la secretaria de Pablo Iglesias en el Parlamento Europeo –según descripción del líder de Podemos–, Dina Bousselham.  

El que fuera presidente del Grupo Zeta, editora de Interviú, Antonio Asensio Mosbah, y el coordinador editorial del Grupo, Miguel Ángel Liso, dieron una versión diferente a la que prestó el exdirector de la revista, Alberto Pozas.

Según relataron Asensio y Liso al magistrado instructor del «caso Dina», Manuel García Castellón, titular del Juzgado Central de Instrucción 6 de la Audiencia Nacional, y a los fiscales anticorrupción, Pozas les contó que una persona les llevó la tarjeta a Interviú, por si querían utilizar su contenido en un reportaje.

«El director de Interviú me contó que había venido [a la revista] un cliente que había ido a un hotel a dormir y que en la mesilla se había encontrado ese soporte, la tarjeta telefónica. Que lo había visto, porque era llamativo, y que lo ofrecía a Interviú. Le dije que esto tenía que verlo el presidente. De manera inmediata me fui al despacho de Antonio», relató Liso en el interrogatorio al que fue sometido en el marco de la instrucción del «caso Dina».

Junto a la tarjeta de memoria, Pozas imprimió varias fotocopias de fotos de índole íntima de la joven y otras de Pablo Iglesias, que contenía el soporte electrónico, y se las entregó a Liso.  

Asensio declaró en la misma línea: «La pregunta que hice fue, ¿y esto cómo os ha llegado? –a Liso–. Me dice Alberto, el director de Interviú, que lo han encontrado en un hotel y que alguien nos lo ha traído. Lo que parecía lógico es que lo que la señora o señorita se había dejado el teléfono y que alguien lo vio. Era algo muy raro y así lo percibimos entonces«.

Liso y Asensio estudiaron el tema.

«Vimos que era un tema estrictamente personal», añadió el coordinador editorial del Grupo Zeta. «Había unas fotos en ropa menor, alguna desnuda. Y alguna de Pablo poniéndose una camisa», precisó.

«Se creyó que era la pareja del dirigente de Podemos, de Pablo Iglesias. Es lo que pudimos intuir. Esa una razón por la que decidimos entregarle la tarjeta. Se podía inferir que era una persona muy cercana a Pablo Iglesias. No sabíamos quien era», añadió Liso.

La versión de Pozas es que no supo de dónde le vino la tarjeta de memoria.

No sabe si procedió de recepción o de cartería.

Pero «sí que llegó dentro de un sobre ocre, sin sellos. Y no recuerdo más. Ponía Interviú, simplemente». 

Es decir, «alguien» debió de llevarlo en mano, se deduce de su testimonio ante el magistrado y los fiscales anticorrupción.

IRRUMPE VILLAREJO

El reportero de Interviú que tenía como fuente al comisario José Manuel Villarejo era Daniel Montero.

Al fichar por El Español en 2015, la revista se quedó sin dicha fuente. Probaron con otro periodista pero al final asumió esa responsabilidad el subdirector, Luis Rendueles. Y Villarejo volvió a ser fuente del medio.

Un tiempo después de que Asensio devolviera la tarjeta de Dina Bousselham a Pablo Iglesias, el 20 de enero de 2016, Villarejo se puso en contacto con Rendueles.

De acuerdo con el exsubdirector de Interviú, Villarejo era, en aquel entonces, «un comisario premiado que acaba de participar en temas contra la corrupción (casos Bárcenas y Pujol)» se puso en contacto con él y le requirió el material.

Pozas accedió y Rendueles organizó una comida en Madrid.

En esa comida, Alberto Pozas le entregó a Villarejo el contenido de la tarjeta de Dina Bousselham, de lo que se deduce que Asensio devolvió a Iglesias la tarjeta original pero en Interviú se quedaron con una copia de su contenido. 

«La comida tuvo que ser antes de abril, después sale una noticia de Podemos sobre unos pagos. Es cuando la UDEF abre una investigación sobre Podemos que se acaba archivando en el Tribunal de Cuentas».

Posteriormente es cuando OkDiario publica una información sobre Mariló Montero, «pero no se si esa información estaba en pendrive».

Rendueles recordó que cuando Villarejo entró en prisión –noviembre de 2017– «Cuatro directores generales de la Policía firman una carta diciendo que la conducta de Villarejo es intachable. Un policía con varias medallas. Una persona muy importante para la Policía Nacional. No necesito ver un informe de la Policía para confiar en los comisarios. En 2015 el comisario Villarejo era alguien muy importante en la Policía», aunque «hoy en día, entiendo que a Villarejo no tengo que darle ni la hora».

El que fuera subdirector de Interviú reveló en el interrogatorio del fiscal, Ignacio Stampa, que «me han pedido muchas veces otros comisarios material, y se lo hemos entregado», para explicar la entrega del pendrive a Villarejo por el director de la revista.

Stampa le preguntó a Rendueles «si era interesante sacar semidesnuda a la novia de Pablo Iglesias en la portada de Interviú en esa época de elecciones en 2016», y «si sospecha si llegó a la revista el material por Villarejo».

A lo que Rendueles alegó que no se lo había planteado nunca.

Tampoco se planteó Rendueles si podía estar cometiendo un ilícito cuando Pozas entregó el «pendrive» con la información de la tarjeta del teléfono de Dina Bousselham al comisario Villarejo.

Quien sí lo consideró fue el magistrado García Castellón que imputó a ambos por un supuesto delito de revelación de secretos de Iglesias,

Noticias Relacionadas:
Lo último en Tribunales