El Tribunal Supremo estadounidense se pronunciará sobre si el expresidente Trump goza de inmunidad
Los jueces del Tribunal Supremo estadounidense. Sentados, de izquierda a derecha, Sonia Sotomayor, Clarence Thomas, John G. Roberts, Jr., presidente, A. Alito y Elena Kagan. De pie, de izquierda a derecha Amy Coney Barrett, Neil M. Gorsuch, Brett M. Kavanaugh y Ketanji Brown Jackson. Foto: Fred Schilling/Tribunal Supremo.

El Tribunal Supremo estadounidense se pronunciará sobre si el expresidente Trump goza de inmunidad

|
29/2/2024 09:50
|
Actualizado: 29/2/2024 11:58
|

El Tribunal Supremo anunció ayer que el 22 de abril próximo escuchará los argumentos de las partes y emitirá una decisión sobre si el expresidente Donald Trump posee inmunidad para ser procesado por la ocupación del Capitolio, sucedido el 6 de enero de 2021.

Incluso si los jueces finalmente fallan en contra de Trump, su decisión de intervenir podría retrasar su juicio durante varios meses, poniendo en duda que se pueda celebrar antes del otoño.

Las elecciones a la Presidencia están fijadas para el 5 de noviembre

Los nueve jueces del Tribunal Supremo, que hace las veces de Tribunal Constitucional en ese sistema anglosajón de justicia, deben pronunciarse sobre la siguiente pregunta: ¿Un expresidente goza de inmunidad penal por conductas supuestamente relacionadas con actos oficiales durante su mandato? Y en caso afirmativo, en qué medida?

El Tribunal Supremo ha sostenido previamente que los presidentes son inmunes a la responsabilidad civil por actos oficiales, y los abogados de Trump han argumentado durante meses que esa protección debería extenderse también al enjuiciamiento penal.

Los tribunales inferiores han rechazado hasta ahora la novedosa alegación de Trump de que los expresidentes gozan de inmunidad absoluta por acciones que entran dentro de sus funciones oficiales.

El Tribunal Supremo, con una mayoría conservadora, tres de cuyos miembros fueron nombrados por el propio Donald Trump durante su mandato, se encuentra, por lo tanto, ante una decisión histórica.

Porque su fallo no solo determinará el futuro legal de Trump sino que también podría sentar un precedente significativo sobre la responsabilidad de los presidentes una vez que dejan el cargo.

La fecha límite establecida por el tribunal para que Trump responda a la demanda indica la rapidez con la que el Supremo desea abordar este tema​.

La petición, presentada por el fiscal especial Jack Smith, busca que la Corte se pronuncie sobre si un exmandatario es completamente inmune a ser imputado con cargos federales, específicamente en el contexto de los intentos de revertir el resultado de las elecciones estadounidenses de 2020.

DIVISIÓN Y CONTROVERSIA SOBRE LA INMUNIDAD

Expertos legales y políticos están divididos: algunos argumentan que conceder inmunidad total a los expresidentes podría abrir la puerta a abusos de poder, mientras que otros sostienen que sin dicha inmunidad, los presidentes estarían sujetos a persecuciones políticas después de su mandato.

Un gran jurado de Washington previamente había establecido que Trump, convertido ahora en ciudadano Trump, no goza de la inmunidad presidencial en el proceso que enfrenta por injerencias en los comicios de 2020, un fallo que el equipo del republicano ha decidido apelar.

Trump fue acusado de cuatro cargos de delito grave que surgieron de sus esfuerzos -algunos públicos y otros a puerta cerrada- para evitar que Joe Biden fuera declarado como ganador de las elecciones de 2020.

La reclamación de Trump de inmunidad absoluta por sus actos como presidente ha sido ridiculizada por muchos expertos jurídicos.

En una de las vistas judiciales, uno de los abogados de Trump afirmó que el ex presidente podría estar protegido de la acusación incluso si hubiera dicho a un equipo SEAL de la Marina que matara a uno de sus rivales políticos.

Este desarrollo subraya la complejidad del debate legal y las profundas divisiones en cuanto a la interpretación de la ley y la Constitución de Estados Unidos​

La controversia sobre la inmunidad de Trump ha suscitado un debate más amplio sobre los principios fundamentales de la democracia estadounidense, incluido el equilibrio de poderes y la rendición de cuentas de los líderes electos.

La implicación del Tribunal Supremo en este asunto llega en un momento de tensiones políticas y polarización en Estados Unidos.

Con el juicio previsto para comenzar el 4 de marzo de 2024, coincidiendo con el proceso de primarias presidenciales del Partido Republicano, las repercusiones de esta decisión se extenderán más allá de los tribunales, influenciando el ciclo electoral y posiblemente el futuro político de Donald Trump​.

Noticias Relacionadas:
Lo último en Tribunales