El Brexit destapa las deficiencias del sistema penitenciario británico y complica las extradiciones con el Reino Unido
De izquierda a derecha, Carlos Bautista, José Ramón Navarro, Jaime Campaner y Joaquín Delgado. Foto: Confilegal.

El Brexit destapa las deficiencias del sistema penitenciario británico y complica las extradiciones con el Reino Unido

|
13/10/2024 00:45
|
Actualizado: 13/10/2024 14:08
|

La salida del Reino Unido de la Unión Europea no solo ha transformado las relaciones comerciales y judiciales, sino que ha puesto en evidencia graves deficiencias en el sistema penitenciario británico.

Ha abierto una ventana incómoda hacia el interior de un sistema penitenciario que hasta ahora se había mantenido bajo un manto de confianza automática. Mientras formaba parte de la UE, la cooperación judicial fluía sin mayores cuestionamientos, apoyada en la Orden Europea de Detención Europea (OEDE), que permitía la rápida entrega de personas entre Estados miembros.

Pero esa confianza se ha evaporado con el Brexit, dejando a los tribunales europeos frente a una realidad que no pueden seguir ignorando: algunas prisiones británicas ocultan graves carencias que vulneran los derechos humanos más fundamentales.

Este es un dato que emergió en el panel titulado «El proceso de extradición a examen. Retos futuros», que formó parte del 19 Congreso de la Abogacía de Málaga. En el milsmo tomaron parte José Ramón Navarro, presidente de la Audiencia Nacional, Carlos Bautista, exfiscal de la Audiencia Nacional y ahora abogado de la firma Chabaneix Abogados Penalistas, Joaquín Delgado, magistrado de la Sala de lo Penal de ese mismo órgano judicial y Jaime Campaner, socio director de Campaner Law.

Fue precisamente este último letrado, especializado en derecho penal internacional, el que llamó la atención sobre esta circunstancia que tiene como fuente los propios informes oficiales del Reino Unido.

«De acuerdo con el informe elaborado por el inspector jefe de prisiones de Su Majestad sobre la prisión de Wandsworth, una de las prisiones más grandes y conocidas del Reino Unido, situada al suroeste de Londres, el escenario que describe es preocupante: Celdas aborrotadas, internadas e internos hacinados en espacios donde falta lo más básico, como la higiene», explicó Campaner.

«En algunas instalaciones, los presos se ven obligados a elegir entre hacer ejercicio o ducharse, decisiones que para cualquier ser humano deberían ser inimaginables. A esto se suman patios exteriores convertidos en vertederos improvisados, plagados de basura y ratas, haciendo evidente un abandono sistemático. Sin el paraguas de la supervisión europea, estas grietas han quedado más expuestas que nunca», añadió.

Esto ha generado dudas serias sobre la capacidad del Reino Unido para garantizar los estándares mínimos de dignidad y humanidad en el sistema penitenciario británico.

Wandsworth ha sido colocada en «medidas especiales» debido a fallos sistemáticos en su gestión.

Informes de ombudsman y auditores han evidenciado cómo estos problemas han impactado de manera directa en la seguridad y bienestar de los internos, aumentando el riesgo de suicidios y episodios de violencia​.

De izquierda a derecha, Carlos Bautista, José Ramón Navarro, Jaime Campaner y Joaquín Delgado. Foto: Confilegal.

LA DESAPARICIÓN DEL MANTO DE LA CONFIANZA MUTUA DE LA UE, CLAVE

Sin el paraguas de la supervisión europea, estas grietas han quedado más expuestas que nunca, generando dudas serias sobre la capacidad del Reino Unido para garantizar los estándares mínimos de dignidad y humanidad en su sistema penitenciario.

El impacto de esta situación ha sido inmediato en el ámbito de la cooperación judicial. Ya no basta la palabra del Reino Unido para asegurar que las personas extraditadas serán tratadas con justicia.

Este es un hecho innegable: El Brexit ha hecho mucho más que levantar nuevas fronteras: ha despojado al sistema británico de su inmunidad de confianza y ha forzado a Europa a replantear las bases de su cooperación judicial, debilitando el principio de confianza mutua que antes facilitaba la entrega de ciudadanos entre los países europeos sin mayores obstáculos.

Una consecuencia directa del Brexit, explicó el exfiscal Bautista, uno de los grandes especialistas en Órdenes Europeas de Detención y Entrega, es que este sistema de cooperación con el Reino Unido ha dejado de estar operativo.

A través de las OEDE las autoridades judiciales de los 27 países de la Unión Europea se comunican directamente, facilitando la entrega de personas acusadas o condenadas por delitos graves, eliminando muchos de los obstáculos burocráticos y políticos presentes en los procedimientos tradicionales de extradición.

Al dejar de pertenecer a la UE, se ha regresado al sistema de extradición, «con lo que se ralentizan las extradiciones y complican la cooperación judicial, especialmente en casos complejos», explicó Bautista.

Tanto este procedimiento de OEDE como el de la extradición se realiza desde la Audiencia Nacional.

El TJUE ha señalado que la Decisión Marco 2002/584/JAI, que regula las OEDE, no se aplica automáticamente a las órdenes emitidas por el Reino Unido después del Brexit. En una reciente sentencia ha enfatizado que estas órdenes deben ser evaluadas bajo el prisma del respeto a los derechos fundamentales y las garantías judiciales.

Esto incluye la necesidad de asegurar que no existan riesgos de violaciones graves de derechos humanos en el contexto del procedimiento penal en el Reino Unido.

Lo que refleja un giro profundo en la forma en que los tribunales europeos gestionan sus relaciones con el Reino Unido, forzándolos a tomar en cuenta las duras realidades de un sistema carcelario que, según parece, se ha quedado rezagado.

El magistrado Joaquín Delgado destacó la importancia de este cambio: «El espacio judicial europeo que dio lugar a la orden de detención europea ya no es aplicable. Tras la desaparición de la Orden Europea de Detención Europea el nuevo marco de cooperación entre el Reino Unido y la Unión Europea ha introducido mayores obstáculos y complicaciones en los procesos de extradición. Ahora, se aplica un procedimiento de extradición más lento y burocrático, lo que ha provocado una extensión significativa de los plazos«.

Noticias Relacionadas:
Lo último en Mundo Judicial