El periodista Paco González con su esposa, María Teresa, a la que casi quita la vida Lorena Gallego. EP.
El periodista Paco González afirma ante el tribunal que no tuvo relación alguna con Lorena Gallego
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19/4/2016 13:49
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Actualizado: 19/4/2016 14:27
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El periodista deportivo Paco González declaró ante el tribunal que no tuvo relación alguna con Lorena Gallego, la mujer que trató de matar a su mujer a cuchilladas. Desmintió así la afirmación de la mujer, el día anterior, de que había pasado una noche con él.
«Lorena empezó a venir en 2010 [al programa ‘Tiempo de Juego’, en Cadena COPE, que presenta y dirige]. Llamó la atención de que se quedaba hasta el final. Parecía una oyente extraordinariamente fiel. Se quedaba sola y nos decía ¿qué hacéis?, y le decíamos que íbamos a tomar una copa. Jamás en mi vida estuve con Lorena a solas. Nunca. Ni fuera ni dentro de la radio. Quisimos ser amables porque era una oyente fiel», relató.
«Nunca pensé que estaba obsesionada conmigo. Me declaró su amor y le dije que no. Y hasta luego. No pensé que llegaría a más», continuó explicando al tribunal, como testigo, y, por lo tanto, bajo promesa o juramente de decir la verdad.
González insistió en que jamás estuvo con ella a solas. «Alguna vez fuimos a tomar una copa junto a 40 personas», ha matizado.
Señaló que, en una ocasión, le mandó un correo muy extenso declarándole su amor. «Le dije que le agradecería que no viniera al programa», aseguró. Fue a partir de entonces cuando González dio órdenes para que no pudiera entrar en el programa.
El periodista contó, asimismo, que en una ocasión Iván Trepiana, el hombre que acompañó a Lorena Gallego en la agresión a su mujer y a su hija, se presentó en su casa.
«No vuelvo a saber nada de ellos hasta que se presentan en un programa en San Sebastián y me presenta al chico como a su novio», manifestó.
A escasos metros de su acosadora, el locutor quiso dejar claro, al inicio de su comparecencia, que «ahora mismo» siente hacia los acusados «toda su enemistad del mundo».
MATAR A SU MUJER
En cuanto al encargo de asesinar a su mujer, ha explicado que recibió en el correo del programa un mensaje en el que una persona comentaba que necesitaba ponerse en contacto con él por una cuestión de «vida o muerte».
Le llamó haciéndose pasar por el productor del programa y éste le dijo que tenía una grabación con el encargo del asesinato de la mujer del periodista. «Todo era muy raro», pensó entonces el locutor. «Como no era una amenaza real, tampoco le quise asustar», ha señalado.
Lorena Gallego e Iván Trepiana se sientan desde el lunes en el banquillo de los acusados.
se sientan desde ayer en el banquillo de los acusados por los hechos ocurridos la mañana del 5 de febrero de 2014, cuando intentaron matar a la esposa del popular periodista. La primera se enfrenta a una pena de 34 años de reclusión en un centro penitenciario psiquátrico y el segundo, a 20 años de prisión.
En su declaración, la vallisoletana quiso ayer pedir perdón a la familia, manifestando que estaba «muy arrepentida» y que no la tuvieran miedo. Además, detalló cómo se produjeron los hechos y aseguró que durante el forcejeo que mantuvo con la mujer del periodista, ésta le apuñaló varias veces. Lo hizo porque estaba enamorada «hasta tal punto de la obsesión».
En la ronda de testigos, Jesús Barrán, el vecino que ayudó a la esposa y a la hija del locutor, ha relatado que se encontraba en las proximidades del colegio donde se produjeron los hechos.
«Se echó al coche una niña llorando ensangrentada y vi cómo a una mujer le clavaba a otra un cuchillo. Me bajé del coche en marcha y vi a un joven pálido en el asiento del conductor», ha narrado el testigo.
Tras ello, forcejeó con Iván y logro que éste huyera, atendiendo a la mujer que estaba herida. “Comenté a la madre que se fuera al hospital, ya que estaba herida y tenía bastante sangre”.
Así, ha detallado que pudo ver perfectamente cómo entró el cuchillo de lleno en el tórax y que la agresora fue la chica que huyó del lugar corriendo. «La hija gritaba: ‘Por Dios, nos quieren matar'», ha manifestado el testigo.
Un profesor que estaba en los alrededores de la zona ha explicado que vio el forcejeo y a la acusada con un cuchillo en las manos. «Había mucha sangre. Parecía que el forcejeo acababa de empezar. Ellos iban muy cubiertos. No se les veía la cara», ha detallado el testigo, quien el día de los hechos corrió para tratar de atrapar a los agresores.
EL BÚLGARO
Por otra parte, también declaró un testigo de nacionalidad búlgara, quien aseguró que un compatriota le propuso en 2013 un trabajo encargado por orden de los acusados Lorena Gallego e Iván Trepiana, consistente en asesinar a la esposa del periodista Paco González.
Plamen Trifonov, que así se llama esta persona, declaró como testigo en la segunda sesión de la vista oral que se celebra en la Audiencia Provincial de Madrid contra Lorena Gallego e Iván Trepiana.
Ayudado por un intérprete, ya que no habla español, Trifonov reveló que Lyubomir Dimitrov, un compatriota búlgaro, le telefoneó en 2013 para encargarle un trabajo que le habían pedido los dos acusados, consistente en dar una paliza a una mujer. Él entendió después de que lo que querían en realidad era que matara a esa mujer, que era la esposa de González, pero se negó.
Luego aparecieron dos personas más de origen ruso que sí que estaban interesadas en el trabajo.
Trifonov grabó las conversaciones en los tres encuentros que mantuvo para entregárselas a la policía. El búlgaro precisó que estuvieron presentes Lorena e Iván. En la vista se escuchó una de esas grabaciones en la que se oye la voz de la acusada.
El búlgaro afirmó que los acusados les ofrecieron dinero a los rusos y que éstos aceptaron, pero ha detallado que no dieron muchos datos de la mujer a la que supuestamente pretendían asesinar.
De la misma forma, declaró que no tenía miedo de los procesados pero sí de los rusos porque «son capaces de hacer algo así», aunque también dijo que ellos «eran unos mentirosos», puesto que sólo querían el dinero para irse de España, haciendo creer a los acusados que sí que matarían a la mujer. «Los rusos no sabían nada de las grabaciones, si no yo no estaría aquí», concluyó este testigo búlgaro. EP.
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