Una cirujana plástica indemniza con 8.000 euros a una paciente por publicar fotos en Instagram del antes y después del pecho
Ello supone una intromisión ilegítima en el derecho a la propia imagen y a la intimidad de la paciente.

Una cirujana plástica indemniza con 8.000 euros a una paciente por publicar fotos en Instagram del antes y después del pecho

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08/2/2024 06:32
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Actualizado: 07/2/2024 23:57
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La Audiencia Provincial de Mallorca ha ordenado a una cirujana plástica indemnizar con 8.000 euros a una paciente que se hizo un aumento de pecho por publicar en Instagram fotos de ella del antes y del después de la intervención, sin permiso. 

Ello supone una intromisión ilegítima en el derecho a la propia imagen y a la intimidad de la paciente. Fue una amiga de la mujer la reconoció pese a que no se le veía el rostro.

Sin embargo, en un principio, el Juzgado de Primera Instancia Nº24 de Palma dictaminó que la indemnización debería ser de 15.000 euros. Pero tras el recurso presentado por la cirujana, los magistrados María Pilar Fernández (presidenta y ponente), Juana María Gelabert y Gabriel Oliver decidieron rebajar el importe en la sentencia 502/2023 de 20 de octubre.

La cirujana, del Hospital Universitario Son Llàtzer, le realizó a la mujer una mamoplastia de reducción sin prótesis el 23 de enero de 2018. Posteriormente, y sin su consentimiento, publicó una fotografía en dicha red social donde aparecían sus pechos, lo que le provocó un gran sufrimiento. 

De modo que decidió demandarla. En cambio, la médico manifestó en el escrito de contestación que ella sí lo había autorizado en el consentimiento informado y que dichas publicaciones tenían por finalidad divulgación médica, no comercial. Asimismo, relató que en las imágenes se habían tapado todos los elemento que le hacían identificable.

Pues bien, tal y como se explica en la sentencia, se consideró probado que la cirujana tapó con unas formas geométricas blancas los pezones y el colgante que llevaba puesto la mujer. Pero en la parte superior de la composición aparecía el logo comercial acompañado de las palabras “antes y después”.

Consentimiento con fines médicos, pero no para Instagram

Además, la composición iba acompañada de un texto donde se podía leer: “Nos habéis preguntado mucho cómo quedaría el pecho después de una reducción de mamas sin prótesis”.

Para el tribunal, dicha operación no tenía ningún tipo de interés informativo ya que son intervenciones comunes sin ninguna peculiaridad que pueda generar un interés general, como puede ser, por ejemplo, una operación pionera en el mundo o en el país. Tampoco era una persona pública. 

Por lo que «no perseguían ningún interés científico ni cultural que pudiese ser entendido como interés general a los efectos del artículo 8 de la Ley Orgánica 1/1982”.

Y aunque la cirujana se defendió diciendo que sí había dado consentimiento, lo cierto era que no había prueba alguna sobre ello. “Firmó un consentimiento informado de la operación a la que se sometió” en la que autorizaba a que le hiciesen fotografías de la zona tratada para ser utilizadas con fines científicos, docentes o médicos.

Pero el Instagram de la cirujana no era de contenido médico ni científico porque aparecía su logo comercial y se daban consejos de belleza, por lo que no dio consentimiento expreso. 

Rebaja de indemnización de la cirujana

Apreciada la intromisión ilegítima en el derecho a la intimidad e imagen de la paciente, hay que acudir al artículo 9.3 de la Ley de protección civil del derecho al honor, a la intimidad personal y familiar y a la propia imagen.

En ella se explica que “la indemnización se extenderá al daño moral que se valorará atendiendo a las circunstancias del caso y a la gravedad de la lesión”. Para ello, se tiene en cuenta la difusión o la audiencia del medio a través del que se haya producido. 

La sentencia de instancia consideró que la suma era de 15.000 euros, pero en este caso, aunque Instagram es público, los magistrados explicaron que no tenían datos objetivos que les permitiesen saber el número de persona que pudiesen tener conocimiento de ellas aun teniendo 450 seguidores.

Tuvieron en cuenta que vivía en un pueblo pequeño, sin notoriedad pública, reconoció que tenía un problema psicológico por el exceso de pecho, que la gente del pueblo ya sabía que se había operado el pecho antes de las fotos, por lo que los magistrados entendieron que la indemnización debía ser menor, fijándola en 8.000. 

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