Airbnb no deberá regularse como una inmobiliaria

Airbnb no deberá regularse como una inmobiliaria

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25/12/2019 00:00
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Actualizado: 25/12/2019 00:00
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La sentencia tiene su origen una demanda de la Asociación para el Alojamiento y el Turismo Profesional de Francia (Ahtop) contra Airbnb Ireland al señalar que la ley inmobiliaria francesa (Loi Hoguet), se debía aplicar a los servicios de la plataforma, a la que considera un «agente inmobiliario».

El Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) considera que Airbnb es un «servicio de la sociedad de la información» y no debe regularse según las normas que se aplican a los agentes inmobiliarios porque, entre otras razones, la web no fija los precios de los alquileres.

El tribunal contesta así a una consulta planteada a la corte europea por un tribunal de París, a raíz de una denuncia de la Asociación para el alojamiento y turismo profesional de Francia contra la plataforma Airbnb Ireland de alquiler temporal de apartamentos.

Airbnb, a cambio de una remuneración, pone en contacto a potenciales arrendatarios con arrendadores

La corte europea explica en su sentencia que procede calificar de «servicio de la sociedad de la información» a una plataforma como Airbnb que, a cambio de una remuneración, pone en contacto a potenciales arrendatarios con arrendadores, profesionales o no profesionales, que ofrecen servicios de alojamiento de corta duración.

Así, afirma que queda comprendido en el ámbito de aplicación de la Directiva de 2000 sobre el comercio electrónico, y considera que Francia no puede exigir a Airbnb que disponga de una tarjeta profesional de agente inmobiliario, al no haber notificado esta exigencia nacional a la Comisión conforme a lo dispuesto en esa regulación europea.

La asociación hotelera francesa argumentaba que Airbnb Ireland no se limita a poner en contacto a dos partes gracias a su plataforma digital.

Sino que ejercía una actividad de agente inmobiliario sin estar en posesión de una tarjeta profesional, infringiendo de ese modo una ley nacional que regula las actividades de los profesionales del sector inmobiliario.

Airbnb Ireland, por su parte, alegaba que la directiva europea se oponía a esa normativa francesa.

Para tomar esta decisión, el tribunal ha tomado como referencia su fallo de 2017 favorable a la demanda de la asociación Elite Taxi de Barcelona contra Uber y recuerda que, si un servicio de intermediación cumple los requisitos de la directiva sobre comercio electrónico, constituye a priori un «servicio de la sociedad de la información» distinto del servicio subsiguiente al que está vinculado.

En el caso de Airbnb Ireland, indica que sí cumple esos requisitos y que la naturaleza de los vínculos entre el servicio de intermediación y la prestación de alojamiento no justifica que no pueda ser calificado de «servicio de la sociedad de la información».

Un instrumento de presentación y búsqueda de alojamientos

El TJUE deja claro que Airbnb es un instrumento de presentación y búsqueda de alojamientos, que facilita la conclusión de futuros contratos de arrendamiento, un servicio que no puede considerarse meramente accesorio de un servicio global de alojamiento.

Además, los jueces de Luxemburgo afirman que el servicio de intermediación que prestada la plataforma no es, en modo alguno, indispensable para las prestaciones de alojamiento, ya que los arrendatarios y los arrendadores disponen de otros muchos cauces para ello.

Por último, el tribunal destaca que no tiene información de que Airbnb determine o limite el importe del alquiler solicitado por los arrendadores que utilizan su plataforma, y precisa que otras prestaciones que ofrece la plataforma no ponen en tela de juicio esta conclusión, dado que son meramente accesorias del servicio de intermediación.

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