El fiscal Moreno responsabiliza a los acusados de los heridos el 1-O
El fiscal diferencia a Mundó, Borràs y Vila de los presos y sustenta la rebelión en que éstos alentaron a votar aunque sabían que habría violencia.

El fiscal Moreno responsabiliza a los acusados de los heridos el 1-O

Afirma que los acusados "se sirvieron de la violencia" para conseguir sus fines: la independencia de Cataluña
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04/6/2019 13:32
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Actualizado: 31/7/2020 11:05
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El fiscal Jaime Moreno ha manifestado hoy ante el tribunal que juzga el proceso independentista que los acusados «se sirvieron de la violencia» para conseguir sus fines, la independencia de Cataluña, y por eso «alentaron a la población» a tratar de impedir que la Policía y la Guardia Civil cumplieran la orden judicial de impedir el referéndum ilegal del 1 de octubre de 2017.

Considera que son ellos, y no las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado los responsables de «todos» los heridos el 1-O, tanto agentes como civiles.

Cabe recordar que las defensas pidieron el visionado de los vídeos de los choques entre agentes y votantes.

Moreno se ha manifestado así durante su exposición del informe de conclusiones definitivas de la Fiscalía, que ha durado más de una hora. En esta sesión los 4 fiscales que argumentarán por qué a su juicio los acusados deberían ser condenados por rebelión.

Le ha precedido el fiscal Javier Zaragoza, que ha manifestado que «lo que ocurrió en Cataluña entre marzo de 2015 y octubre de 2017, pero sobre todo en el otoño de 2017, fue un golpe de Estado». Zaragoza ha señalado que el proceso independentista fue «un ataque al orden constitucional» en el que «la violencia utilizada fue un instrumento para favorecer la declaración de independencia mediante la presentación de España como un Estado represor a nivel internacional».

El fiscal Jaime Moreno ha destacado que los acusados «no sólo no desconvocaron el referéndum, sino que alentaron a la población a acudir y ejercer ese enfrentamiento con los policías».

«Quien crea los riesgos es a quien es imputable el enfrentamiento producido», ha subrayado.

Moreno ha hecho hincapié en que «no puede negarse» que en Cataluña «hubo violencia» los meses de septiembre y octubre de 2017, y ha enumerado distintos episodios de «intimidación» que, a su juicio, «alentaron» los acusados con sus sucesivos llamamientos a la población para que trataran de impedir el cumplimiento de las órdenes judiciales.

Ha manifestado que los acusados, en su objetivo de «derogar la Constitución en Cataluña» y declarar la independencia, «ostentaban el poder en una comunidad autónoma» que disfruta de una «autonomía enorme con capacidad de gasto, recursos propios y su propia policía».

No necesitaban tomar centros de poder, ha añadido, porque ya lo ostentaban ellos: «No se trataba de un pequeño barco que necesita asaltar un buque, sino de un pequeño barco que quería soltar amarras del buque», ha añadido.

El fiscal se ha preguntado durante su alocución si los acusados sabían que se podían producir los enfrentamientos que finalmente ocurrieron.

Para contestar a esa pregunta, ha acudido primero a las reuniones «clave» que los días previos al referéndum mantuvieron el expresidente Carles Puigdemont, el exvicepresidente Oriol Junqueras y el exconsejero de Interior Joaquim Forn con los mandos de los «Mossos d’Esquadra», pero también con los responsables de Policía Nacional y Guardia Civil en Cataluña.

La Fiscalía ha creído lo declarado en el juicio por los que eran jefes de los «Mossos» en otoño de 2017, Josep Lluís Trapero, Ferrán López, Joan Carles Molinero, Emili Quevedo y Manel Castellví, quienes advirtieron a los exdirigentes catalanes de que la convocatoria de referéndum podía acarrear enfrentamientos, un escenario que, como se vio luego, «se quiso transitar».

Moreno ha descartado que el resto del gobierno catalán no conociese esas advertencias que se transmitieron a Puigdemont, Junqueras y Forn.

Ha dicho que aunque sus compañeros no les hubiesen informado de ello, todos los consejeros tenían la «experiencia y conocimiento de lo ocurrido» el 20 de septiembre de 2017, con la protesta frente a la Consejería de Economía.

«¿Es posible no plantearse que en ese clima y ese escenario que iba a haber enfrentamietnos entre ciudadanos y las fuerzas de seguridad? La respuesta lógica y racional es que es absolutamente imposible», ha afirmado.

Respecto al 20-S, el fiscal Moreno ha subrayado el papel que jugaron ese día los presidentes de la Asamblea Nacional Catalana (ANC) y Òmnium Cultural, Jordi Sànchez y Jordi Cuixart, respectivamente.

«Vieron que los detenidos no pudieron entrar para presenciar el registro, se subieron a los coches dañados, vieron que la comisión judicial no pudo salir en ningún momento», ha relatado, y a continuación ha aludido al testimonio del jefe del cuerpo antidisturbios de los Mossos, quien en el juicio aseguró que Sànchez le dijo que sacara a sus agentes de allí y que iba a llamar al presidente catalán y a Forn.

‘ES UN DOLO DIRECTO’

Para el Ministerio Público, «todos» los acusados eran «conscientes de que «era seguro que iba a haber enfrentamientos».

«No estamos ante un dolo eventual. Es un dolo directo, es mucho más», ha resaltado Moreno, si bien ha diferenciado entre los acusados que se encuentran en prisión provisional, todos ellos acusados de rebelión, y los tres exconsejeros a los que los fiscales acusan de malversación, Meritxell Borràs, Carles Mundó y Santi Vila.

El fiscal también se ha preguntado sobre si en Cataluña «se instrumentalizó la violencia», es decir, si los acusados «se sirvieron de ella como herramienta» para conseguir sus fines, y ha enumerado declaraciones y comentarios de Twitter que publicaron los acusados, salvo Vila, Borràs y Mundó.

Moreno ha explicado que en esos mensajes y declaraciones, Oriol Junqueras, Joaquim Forn, Carme Forcadell, Jordi Cuixart, Jordi Sànchez, Raül Romeva, Jordi Turull, Dolors Bassa y Josep Rull llamaron a la participación en el referéndum del 1 de octubre, a «exaltar y defender los colegios», manteniendo así la convocatoria «a pesar de saber que habría choques» con las fuerzas de seguridad.

Por todo ello, la Fiscalía considera probado que desde el 19 de septiembre hasta finales de octubre «hubo violencia» en Cataluña y que «sin ella no hubiese sido posible transitar los caminos necesarios» que llevaron hasta la Declaración Unilateral de Independencia (DUI).

Tras el fiscal Moreno ha proseguido con la exposición de las conclusiones finales la fiscal Consuelo Madrigal, quien ha señalado que el gobierno de Carles Puigdemont actuó como una «organización criminal» para sufragar los gastos del referéndum ilegal del 1 de octubre de 2017 al llevar a cabo una serie de «maniobras para encubrir delitos» y «estrategias negacionistas».

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