El exduque de Palma cumple una condena de cinco años y diez meses por corrupción; ingresó en la cárcel de mujeres de Brieva (Ávila) hace dos años y medio, en un módulo específico sin contacto con el resto de presos. Foto: EP
Prisiones flexibiliza el segundo grado de Urdangarin, que no volverá a la cárcel y dormirá en un centro de inserción social
Irá 5 días a la semana a trabajar y saldrá un fin de semana al mes con la condición de que se someta al programa de reinserción para condenados por delitos económicos
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30/12/2020 16:58
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Actualizado: 30/12/2020 17:04
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Instituciones Penitenciarias ha acordado hoy aplicar el principio de flexibilidad del artículo 100.2 del Reglamento Penidenciario a su clasificación en segundo grado al exduque de Palma, Iñaki Urdangarin, condenado a cinco años y diez meses por el ‘caso Noós’, por corrupción.
Ya no volverá a la cárcel de Brieva (Ávila), en la que está interno desde junio de 2018.
A partir de ahora dormirá en el Centro de Inserción Social de Alcalá de Henares (Madrid), según han informado fuentes penitenciarias.
De esta manera, podrá salir diariamente a realizar su voluntariado en el Hogar Don Orione de Pozuelo de Alarcón (Madrid) y dormirá en el Centro de Inserción Social de Alcalá de Henares.
También podrá disfrutar de un fin de semana libre al mes con la condición de que se someta al programa de reinserción que Prisiones ha puesto en marcha para condenados por delitos económicos.
Prisiones lo implantó a finales de noviembre y del mismo que podrán beneficiarse los más de 2.000 internos que cumplen condena en España por delitos económicos y que representan el 5% del total de la población reclusa.
El objetivo de este programa, denominado Pideco, es la reeducación en aquellos factores personales y situacionales que favorecieron la comisión del delito, así como facilitarle las herramientas para poder enfocar su vida en libertad con una actitud y conducta pro social.
EL JUEZ DE VIGILANCIA PENITENCIARIA CUESTIONÓ SU AISLAMIENTO
Urdangarin ingresó en la cárcel de mujeres de Brieva -situada a 105 kilómetros de Madrid- el 19 de junio de 2018, una vez que el Tribunal Supremo confirmó para él una condena de 5 años y 10 meses de prisión por los delitos de prevaricación continuada y malversación (ambos en concurso), tráfico de influencias, fraude a la Administración y dos delitos fiscales.
El marido de la Infanta Cristina eligió esta prisión de mujeres de Ávila, que cuenta con un módulo especial para varones, para evitar posibles conflictos.
Desde entonces ha estado en un módulo en el que no tiene contacto con otros reclusos.
En septiembre de 2019 se le autorizó, en aplicación del artículo 117 del Reglamento Penitenciario -y con la oposición de la Fiscalía-, que saliera dos veces a la semana de prisión para hacer voluntariado en el Hogar Don Orione, una entidad sin ánimo de lucro gestionada por la congregación religiosa italiana Pequeña Obra de la Divina Providencia; un centro residencial para personas adultas con discapacidad intelectual y alto nivel de dependencia.
La Audiencia Provincial de Palma rechazó el pasado mes de septiembre la progresión al tercer grado al entender que «no se desprendía de la conducta global del interno una evolución suficientemente favorable, por el momento, que permitiera inferir una capacidad para llevar en lo sucesivo un régimen de vida en semilibertad».
El tribunal estimó los recursos de apelación interpuestos por la Fiscalía contra las decisiones del Juzgado de Vigilancia Penitenciaria número 1 de Valladolid, que le concedió una flexibilización del segundo grado para salir un fin de semana al mes y unas semanas después le clasificó en tercer grado.
En sendos autos, suspendió tanto una medida como la otra y dio la razón a la Fiscalía.
El abogado de Iñaki Urdangarin en el ‘caso Nóos’, Mario Pascual Vives, cuestionó la decisión contraria al tercer grado de la Audiencia de Palma recordando que sí había sido aceptado para otros condenados como el expresidente balear Jaume Matas y su exsocio Diego Torres.
En una entrevista en Europa Press, Pascual lamentó que «otras personas en igualdad de circunstancias y de trato» lo tenían desde hace meses.
«Es difícil de entender e incluso de aceptar» esta diferencia, dijo en alusión a los también condenados por el caso.
Urdangarin cumplirá la pena en su totalidad el 9 de abril de 2024.
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